UNA PALETA DE COLORES
Como la paleta de un pintor, en la que además de colocar sus colores los mezcla para generar tonalidades únicas, así es nuestro ser, y de esa misma manera son cada uno de nuestros estudiantes. Mezclas de diferentes tipos de inteligencias para crear tonalidades únicas.
Considero que ese es el reto individual y como docentes, encontrar esa combinación única de talentos, pasiones, y también aspectos menos fortalecidos, para crear una tonalidad individual, única, original e irrepetible; desde la que se pueda aportar a la sociedad, a la familia, pero sobre todo a sí mismo, para poder ser felices y alcanzar una vida plena, conociendo y aprovechando al máximo nuestros talentos, porque, después de todo, si no somos plenos ni felices, difícilmente podremos dar aportes de calidad en nuestro entorno.
Regularmente todo lo que se relaciona con inteligencia se asocia con lo racional y cognitivo, y me parece que el sentido debe ser mucho más amplio, también considero que se tiende a vincular únicamente con el área laboral o de los estudios; pero este abordaje de la inteligencia, desde las inteligencias múltiples, que hemos visto en el curso, nos permite comprender, y con ello debemos mantenerlo presente en nuestra cotidianeidad, que las inteligencias son múltiples, y que todas ellas nos conforman completos como seres humanos, incluyendo todas nuestras facetas. Así que, después de este curso tan interesante como apasionante, puedo concluir con varias ideas importantes:
La primera de ellas es que somos seres completos y podemos integrar nuestra inteligencia en todas sus formas en todas las áreas de nuestra vida, así que es momento de dejar de vincular la inteligencia con las actividades puramente académicas o laborales y saber que o cabemos completos o no cabemos.
También me queda la certeza de que cada uno de nosotros somos únicos e irrepetibles, y eso debe alentarnos para desarrollar nuestros talentos y potenciarlos, para entregar así nuestra mejor versión a nuestro entorno, además, de que no hace falta comparar o compararnos entre nosotros, porque por muy parecidos que podamos parecer, somos únicos.
Para cerrar, menciono esta tercera conclusión con la que me identifico bastante, y es sobre la importancia que tienen para los seres humanos los aspectos socioafectivos como artísticos y creativos, no habrá un ser completo si no desarrolla estos aspectos en su vida, y con preocupante regularidad se les ha relegado a un lugar menos importante.
Hace falta, entonces, seguir conociendo el fascinante campo de las inteligencias múltiples y aplicarlo para la plenitud de nuestra vida, y de la vida de nuestros estudiantes.
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